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jueves, 27 de febrero de 2014

27 de febrero: Nuestra Señora de los Remedios, Chiclana de la Frontera


El origen del culto público a Ntra. Sra. de los Remedios data, según la tradición, desde mediados del siglo décimo quinto. Es una de tantas imágenes medievales, que la piedad de los fieles ocultaría cuidadosamente, para librarla de las profanaciones de los moriscos. Una leyenda muy antigua nos refiere lo siguiente: En un lugar, conocido con el nombre de “Los Palmaretes”, distante medio kilómetro de la villa, se encontraba un pastorcillo, gobernando pacíficamente su rebaño, y, guiado por una luz resplandeciente, que brillaba sobre una palma, vio lleno de asombro aparecer en aquel mismo lugar la pequeñita y peregrina imagen, que en solemne procesión fue conducida a la Iglesia del antiguo Hospital de la Cofradía de San Martín (actual calle Convento).

A partir de 1.577 se establece en aquel antiguo Hospital la comunidad de frailes Agustinos Ermitaños. Estos ciñeron su cintura con la sagrada correa, distintivo de la Orden de Agustinos, y fueron desde entonces propulsores y pregoneros de su devoción y culto. Se narran algunos prodigios obrados por la Santísima Virgen de los Remedios. El 24 de Febrero de 1.738 libró a toda la comarca de una espantosa sequía.

En 1.616 la familia Molina levanta un retablo en la Capilla Mayor de dicho convento que presidiría la devota imagen de Ntra. Sra. De los Remedios.

En 1.656 la familia Molina, que poseía un asiento en el Altar Mayor de la Virgen de los Remedios en virtud del patronazjo, renunciaría a él, cambiándolo por una tribuna en el altar de Nuestro Padre San Agustín, ya que D. Esteban de Molina consideraba “que tener un asiento en el presbiterio era cosa indecente”, aunque seguiría conservando bóveda en el altar para enterrar a los miembros de su familia.

El 13 de Febrero de 1.738 se reúne el Concejo y toma la siguiente decisión: “Por experimentarse la falta de agua para los sembrados y demás frutos y gastos para la conservación de los ganados se haga novenario por este Cavildo, trayendo en procesión a Nuestra Señora de los Remedios y a Jesús Nazareno del Refugio del convento de religiosos agustinos desta villa, trayéndose a la iglesia mayor della, para requerir el Divino Auxilio a su Divina Majestad, para que usando de misericordia infinita y por la intercesión de dicha Nuestra Señora logremos su santo rocío”.

Los resultados no se hicieron esperar ya que tras la procesión del 21 de Febrero, el 24 comenzaba a llover copiosamente y continuaba el 27 en que se celebró un nuevo Cabildo con el fin de nombrar a la Virgen de los Remedios patrona de la villa. “En la villa de Chiclana de la Frontera, en veinte y siete días del mes de Febrero, año de mil setecientos treinta y ocho, estando el Concejo, Justicia y Reximiento della, juntos en su Cavildo y Casas Capitulares, como lo acostumbran, los señores Ldo. Don Alonso Valdés y Saavedra, abogado de los Reales Consejos, Corregidor, Justicia Mayor y Capitán de Guerra. Don Pedro Juan de Segovia, Alférez Mayor; Don Diego Sánchez; Don Cristóbal Zevada, Depositario General; Don Bartolomé Hariza; Don Cristóbal de Molina, Padre General de Menores; Don Francisco de Molina, Procurador Mayor; Don Francisco Basquez, Alcalde de Rentas; Don Cristóbal Paulino; Don Agustín de Guzmán, Alguacil Mayor, Rexidores Capitulares de dicho Concejo y ante mí el escribano mayor se acordó lo siguiente:

Punto 1º: En este Cavildo se dixo por sus mercedes que por otro celebrado en treze del que espira, se acordó, teniendo presente la gran falta de lluvias, traer procesionalmente de su convento de Nuestro Padre San Agustín a la Iglesia Mayor Parroquial de Nuestro Padre Jesús del Refugio y a Nuestra Señora de los Remedios, hazerles novena para ymbocar su protección. Y que haviéndose traido dichas imágenes el viernes veinte y uno del presente, el veinte y quatro apiadándose la Misericordia Divina por los ruegos de su Divina Madre de los Remedios nos ymbió copiosas lluvias que hasta oi se han continuado. Y deviéndose tener por milagrosa respecto a las ningunas señales que presedieron y al grandísimo beneficio que se ha seguido: pues no auiendo llovido el año próximo pasado, se avían muerto los más de los ganados y perdidos todos los sembrados, haiándose oi todos en el más deplorable estado e imponderable conflicto, respecto a que auiendo ya tres meses y medio que no avía llovido, se continuavan los trabajos y los trigos en muchas partes estaban por nacer. Y considerando este Cavildo en la piedad correspondiente y de verdadera veneración a Dicha Deuota Imagen que en lo antiguo fue gran remedio de esta villa en sus necesidades y ahogos. Y que aunque en el año pasado y el presente se valió de otras devociones y le hisieron diferentes rogativas no se consiguió el deseado fin y beneficio, el que haora se ha logrado tan abundante. Y siendo justo corresponder en parte, agradecido este Cavildo a dicha Señora de los Remedios, así para recordar su memoria y devoción como para afianzar en su protección los beneficios, y que conste el que actualmente ha rezevido que, según todas las circunstancias, ha sido milagroso, acordó de conformidad se vote, como desde luego se vota, se haga fiesta perpetuamente a dicha milagrosa imagen de Nuestra Señora de los Remedios anualmente por el día ocho de septiembre, que es el que se venera, cuia función se execute en su convento de Nuestro Padre San Agustín desta villa asistiendo indispensablemente este Cavildo y que se le vote como se le vota y nombra Patrona desta villa para que en todas sus aflicciones, recurriendo a sus misericordias, experimentando sus remedios. Y que sin embargo de los notorios atrazos con que, por la calamidad de los tiempos, como cortedad de Propios, este Cavildo se halla, se le suministre en la fiesta en cada un año a la religiosísima Comunidad doscientos y quarenta reales para que con ellos se apliquen los treinta para limosna de misa, los sesenta para el sermón, los noventa para doze libras de zera que se pongan en el altary trono y los sesenta restantes para emplearlos en los fuegos o lo que sea. Y se entiende con la precisa circunstancias de que el Padre Predicador haia de ser de la Sagrada Religión Agustiniana y de nombramiento del Caballero Diputado que por esta villa se destinare: y que se le haga saver y de testimonio de este acuerdo para su aceptación a dicha sagrada religión por la que se entregue a este Cavildo el instrumento de obligación y aceptación, correspondiente para la perpetuidad de dicha fiesta. Y así se acordó.(1).

Un día después, la Comunidad agustiniana del convento de San Agustín, sita en la iglesia de San Martín, aceptaba las condiciones y acuerdos a que habían llegado los capitulares de Chiclana y enviaban al Concejo carta de aceptación:

“El Maestro Fray Joseph Londoña, calificador de la Suprema y General Inquisición, Prior de este Convento de San Agustín de esta villa de Chiclana de la Frontera, auiendo mandado tocar a consulta, en 28 de febrero del año de 1738, y juntos los P.P. de ella en la celda Prioral, propuso como esta villa y su cabildo avían determinado según el acuerdo que tuvieron el día 27 de dicho mes y año, el que en atención a el beneficio que avían resevido todos con el agua que con tanta abundancia avia imbiado Dios, después de una sequedad tan grande con que se avían remediado los campos, confesando que avía sido milagrosa y que avían conseguido tal favor por la interseción de María Santísima de los Remedios, imagen milagrosíssima que se venera en este convento, para cuio fin avían sacádola en procesión y llevádola juntamente con la imagen de Jesús del Refugio a la Parroquia, en donde se le está haciendo novenario, determinaron botar a dicha Imagen de Maria Santísima de los Remedios por su Patrona y hazerle una fiesta todos los años en el día ocho de septiembre, para lo cual determinaron no sólo concurrir con su asistencia la dicha villa, sino con la suma de 240 reales de vellón en cada un año, distribuidos los 60 para el predicador que ha de ser al arbitrio del Caballero Diputado que nombra la villa, o de este convento o de otro, como sea de Nuestro Sagrado Instituto, hijo de esta Provincia de Andaluzía de la Observancia y 30 de limosna de la misa cantada y 90 reales para la cera y los 60 restantes para fuego. De tal modo que los 240 reales se consuma en esto. Que si les parecía a los P.P. admitir dicha fiesta y si la suma era bastante a lo qual respondieron todos ser muy gustosos y que no solo se obligaban por sí y los que en adelante fueren a cumplir como por dicho Cabildo se pide, sino a salir a resevirlo y despedirlo la Comunidad con ábitos negros y repique de campanas quando vinieren a la función y a darle la paz en la missa por uno de los acólitos al mismo tiempo que a los religiosos, y a manifestar en dicho día 8 de septiembre la Imagen de Jesús del Refugio con sus luzes en atención a que por la invocación e interposición de aquestas dos prodixiosas imágenes se avía conseguido el beneficio. Y suplicaron al dicho Padre Prior diera las gracias a todos los Capitulares en nombre de la Comunidad y que pidiera el testimonio del Acuerdo para archivarlo y protocolarlo y para que se entendiera ser desde este año de 1738 de obligación de este Convento dicha fiesta y para ponerla en las tablas de sus memorias. Y así lo botaron del común consentimiento los que abajo firman en dicho día, mes y año ut supra.

Fray Joseph Landoña Fray Juan Ramos Fray Vizente Abreu (subprior) Fray Andrés de Aragón Fray Diego Rodríguez Fray Juan de Aguilar Fray Manuel Roigan Fray Manuel de Córdova Fray Bernardo de León (2)

A partir de este año, el Cabildo nombraría a primeros de cada año dos Diputados encargados de preparar la fiesta de la Patrona de la villa, el día 8 de septiembre. A la Patrona se recurría en adelante a las calamidades, pero también a otras imágenes de la villa como al Cristo de la Vera Cruz, Ntra. Sra. De la Soledad o al Cristo de la Humildad y Paciencia.

En 1.778 los Agustinos Ermitaños se trasladan a la nueva Iglesia de San Telmo y nuestra Patrona pasa a ocupar el altar que en la actualidad ocupa la imagen de Ntra. Sra. De las Lágrimas y Esperanza, ya que esta última imagen presidía el retablo principal con la advocación de Ntra. Sra. De las Angustias dando nombre al santuario.

El 12 de Julio de 1.916 y tras las gestiones llevadas a cabo por el virtuoso sacerdote Dn. Francisco Fernández Caro, conocido popularmente como el Padre Caro, el Papa Benedicto XV decreta el nombramiento de Patrona Principal de la ciudad de Chiclana a Ntra. Sra. De los Remedios, y con tal motivo se organizan durante aquel verano diversos cultos y actividades culturales extraordinarias.

El 12 de Julio de 1.991 con motivo de conmemorarse el 75 aniversario del nombramiento de Ntra. Sra. de los Remedios como Patrona de la ciudad, el día 12 de Julio, tuvo lugar Solemne Función Religiosa y Salida en Procesión Extraordinaria de la Bendita Imagen por las calles de su feligresía.

Dentro de los actos organizados en la ciudad con motivo de la conmemoración del VII Centenario de la fundación de la Villa, el día 6 de Septiembre de 2.002 se inauguraba un monumento en el lugar conocido antiguamente como los Palmaretes y donde según la leyenda en el año 1.565 se encontró la imagen de la Patrona. Por desgracia, en la inscripción de dicho monumento se ha olvidado la labor que durante cerca de tres siglos llevaron a cabo los PP. Agustinos Ermitaños, que fueron quienes tuvieron bajo su tutela el culto a nuestra Patrona desde el Siglo XVI al XVIII. Los PP. Agustinos Recoletos dirigen el culto a la Patrona desde su llegada a nuestra ciudad en 1.948.


LA HERMANDAD

La Hermandad Nuestra Señora de los Remedios desarrolla con motivo de la festividad de la Patrona de la ciudad del 30 de agosto al 7 de septiembre anual novena. El día 8 de Septiembre, festividad de la Virgen de los Remedios, se reza el rosario de la aurora a partir de las 7,30 h., después será la misa y a las 11,00 se celebra la función principal y a su término comienza la ofrenda floral ante el mosaico instalado por en la iglesia de San Telmo. A las 20,30 h. sale en procesión la imagen de la Patrona por La Plaza, Joaquín Santos, Constitución, Vega, La Fuente, Plaza España, Alameda del Río, La Plaza y a su templo. En la Alameda, en presencia de la Stma. Virgen se procede a la pisa de la uva y se bendice el primer mosto.

La Virgen es portada por costaleros, turnándose cada año la peña Nazarena y la peña de costaleros "La Ilusión".

Nuestra Señora de los Remedios, descubierta en el siglo XVI, recibe culto en la Iglesia de San Telmo. En el emplazamiento de una ermita se construyó esta iglesia en 1783, a la que se trasladaron los religiosos agustinos. En su interior destacan los retablos y algunos cuadros como la Inmaculada del Mulato. En cuanto al exterior es de notar la espadaña angular de concepción muy singular. escrito por José Reyes Cabeza

FUENTES BIBLIOGRÁFICAS:
ARCHIVO HISTÓRICO MUNICIPAL DE CHICLANA.
Actas Capitulares.
ARCHIVO HISTÓRICO PROVINCIAL DE CÁDIZ.
(fuente: www.rafaes.com)

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